Texto y fotografías: Iza Święcicka
Sebastien Boudon presentó el pasado jueves los tres vinos de su nuevo proyecto personal Chapó Wines en la vinoteca Quiero Delicatessen de Villena. Las referencias presentadas fueron Petit Chapó 2011, Chapó 2010 y Grand Chapó 2009, todos ellos amparados bajo la denominación de origen Alicante. El enólogo apostó por las variedades autóctonas de Alicante para la elaboración de sus vinos: Garnacha Tintorera y Monastrell, para reflejar la riqueza vitícola de la provincia y su autenticidad.
El Petit Chapó 2011 es el único vino de la gama que se basa en un coupage de Garnacha con Monastrell. Está elaborado sin madera, en tinajas. Es un vino joven, pero con la complejidad que le aporta la maceración carbónica. El Chapó 2010 y el Grand Chapó 2009 son vinos monovarietales de Monastrell, aunque lo son de momento porque el enólogo confesó que le gustan los coupage, solo que le falta materia prima para poder hacerlos.
El Chapó 2010 está elaborado con Monastrell del Xorret de Catí, cerca de Petrer, a 900 metros de altura. Lleva 12 meses de barrica y es un vino con una acidez muy agradable, como destacó el enólogo. El Grand Chapó 2009 es el corazón de la gama. En este caso la Monastrell proviene de una parcela de Beneixama a una altitud de 600 metros. El suelo es franco, enriquecido por oxido de hielo. Su crianza es de 20 meses en barricas de roble francés de 600 litros, con las que se evita que “la madera se apodere del vino”, como confesó el enólogo.
Sebastien Boudon proviene de la cuarta generación de una familia viticultora de Burdeos (Francia). Desde hace 11 años trabaja como enólogo en las bodegas Heretat de Cesilia en Novelda. Aunque más que enólogo, él se considera viticultor debido a que “no hay grandes vinos sin uva de calidad”, como destacó Boudon durante la presentación. En el año 2009 emprendió su proyecto personal Chapó Wines, que se basa en la apuesta por las variedades autóctonas de Alicante.
Hace unos años, durante una excursión de senderismo a Xorret de Catí de donde ahora proviene el Chapó 2010, Sebastien Boudon descubrió unas cepas de Monastrell, que cuando volvió en el año 2007 estaban vivas, lo que no ocurre normalmente, porque las viñas se mueren cuando se las abandona. Este hecho le conmovió y como confesó Boudon fue el motor de arranque de su proyecto.
IMÁGENES DE LA NOTICIA:
La Bodega Alicantina 